QUINCE años afilando el hacha​ en una startup

Desde que hace QUINCE años Logalty encendió el motor, teníamos claro que cambiaríamos la forma de firmar los contratos para siempre y aunque no se sabía todavía mucho, la ilusión era la de quien va a construir un cohete espacial, aunque no tuviéramos todavía las ruedas para sacarlo del hangar.

En Logalty hemos logrado como equipo algo extraordinario: soñar juntos, a pesar de las estrecheces típicas de quien empieza en un mercado que no demandaba nuestro producto todavía. Nunca hicimos las cosas para solucionar a corto plazo, sino con la idea de que lo que hiciéramos perdurara, afilando cada uno nuestra hacha.

Tengo el privilegio de haber cumplido casi ya 11 años en la fábrica de Logalty, puliendo el cohete y pensando en cómo llegar a otros planetas, y aunque como Director de Operaciones, evidentemente los procesos, los datos o el cambio constante son el día a día, mi reto fue el de convertir las Operaciones en un activo, un centro de generación de valor para nuestros clientes.

“Dame seis horas para cortar un árbol y pasaré las primeras cuatro afilando el hacha. Abraham Lincoln”…desde luego este señor no trabajaba en una startup.

Todos conocemos la frase célebre de Lincoln sobre la importancia de planificar y pasar tiempo mejorando nuestro sistema, pero desde luego que este señor no trabajaba en una startup, sino que trabajaba en una Corporate de gran prestigio, donde los procesos maduros son frecuentes y la cantidad de personas es más razonable.

Hoy tenemos microservicios, robotización e inteligencia artificial (como no!) y muchas otras cosas, pero hace 10 años como valientes empezamos a dar soporte proactivo, esforzándonos mucho en entender el negocio de nuestros clientes y sus procesos clave, incluso abriéndoles nosotros incidencias o dando seguimiento a sus cambios, todo porque nos preocupa generar valor.

Con esa actitud el engagement con nuestros clientes ha sido habitualmente recíproco y natural. Cuando demuestras que quieres que tus clientes optimicen sus procesos, aunque a veces eso signifique consumir menos tu servicio, pero mejor, contribuyendo al afilado de su hacha, en nuestra humilde contribución, la respuesta es magnífica.

Hoy hacemos más de 250 seguimientos anuales con clientes, con su plan de acción individual, creamos más de 2.500 tickets mensuales de soporte proactivo y ejecutamos más de 100 informes y extracciones diarios, todo esto junto con el soporte a la integración para todas nuestras nuevas llegadas, hace de Logalty un sitio peculiar, pero centrado en el cliente y sobretodo en cómo ese cliente vive la experiencia Logalty.

Mirando hacia atrás siento que Logalty ha sido audaz, como lo son todos los que creen a tope en generar un impacto duradero en la sociedad, liderando nuestro mercado sin renunciar a conceptos de gran complejidad tanto técnica como jurídica y que no eran populares, pero está mereciendo la pena, porque sin duda lo mejor está por llegar.

Además de contar con un equipo de lujo, llevamos QUINCE años preparándonos para una Digitalización intensa, para el momento actual, aunque la Pandemia por sorpresa se convirtiera en su gran motor que nos ha puesto a prueba, pero nos ha demostrado que , que tenemos un robusto cohete que hay que seguir cuidando con el mismo foco y dedicación, aunque sea desde casa.

Creo que acerté en pensar que en Logalty debíamos afilar el hacha porque hace que estemos mejor preparados y que disfrutemos el viaje, lo que hace que mañana podamos llegar a las estrellas.